Deja de romantizar el café de las mañanas

Alrededor del mundo se ha romantizado la idea de tomar café por las mañanas e incluso antes de consumir cualquier alimento, para despertar.

Fisiológicamente, la cafeína aumenta la presión arterial, la frecuencia respiratoria y la diuresis.

Y sí, se puede sentir como mejores niveles de energía pero eso sentimos puede ser únicamente un sistema nervioso alterado [1].

Cientos de pesos gastados en el estimulante más común a nivel mundial de nuestro sistema nervioso central.

¿Pero en qué contextos nos favorece y cuándo no?

En un bajo consumo (2 tazas por día aproximadamente) estudios demuestran que la cafeína puede estimular la memoria, capacidad cognitiva y suprimir el sueño [2].

En nuestro cuerpo la cafeína inhibe los receptores de adenosina lo cual estimula la secreción de norepinefrina, dopamina, serotonina, acetilcolina y glutamato. Neurotransmisores que mejoran el estado de ánimo, aumentan las conexiones nerviosas, mejoran la memoria y estado de alerta.

¿Entonces por qué dejar de romantizarlo?

No se trata de eliminarlo, sino tomarlo de manera consciente, específicamente si vives con trastorno de ansiedad generalizada.

La cafeína se absorbe casi completamente en el tracto intestinal de forma rápida, aproximadamente a los 45 minutos de su ingesta, absorción que puede ser acelerada si se consume en ayunas. Aproximadamente dura en nuestro cuerpo entre 2.5 horas a 4.5 horas, y conforme vayamos acumulando tazas a lo largo de día sus efectos van aumentando [1].

Sí, consumir cafeína en ayunas sólo puede estar aumentando nuestros niveles de ansiedad, nerviosismo, insomnio, inquietud y también trastornos fisiológicos como taquicardia y del sueño [1].

Incluso se ha asociado con un aumento de síntomas de depresión en estudiantes de universidad, que tienen un consumo mayor de 4 tazas por día [2].

¿Cómo integrarlo cuidando tu ansiedad y salud?

• En ayunas: toma té o 1 vaso con agua, así te darás cuenta si realmente estás descansando. Valora tus niveles de energía, quizá necesitas mejorar tu higiene de sueño y consumo de alimentos.

• ¿Quieres despertar? Consume algo que te aporte más energía y no sólo altere tu sistema nervioso: licuado, fruta, desayuno completo. No te quede únicamente con el café en ayunas. Me encantaría decirte qué desayuno te puede funcionar mejor pero eso puede variar según tu contexto y lo desconozco.

• Si amas el café y te rehúsas a dejarlo. Prueba tomarlo después del desayuno, verás como mejora tu energía, digestión e incluso tu estado de ánimo.

• Si vives con ansiedad o alguien que constantemente se siente estimulado, acelerado e inquieto incluso sólo mentalmente, te recomiendo experimentar unos días y ver si te ayuda a calmarte. También puedes usar opciones descafeinadas o tés que contienen una concentración más baja o simplemente comenzar a reducir la cantidad de cafeína.

• ¿No puedes dormir? En éste caso si lo llegas a consumir, de preferencia que sea 4 horas antes de ir a dormir para que te permita descansar. Sí aún así no ves cambios suprímelo por unas días o pide ayuda de un profesional que te pueda asesorar.

Bibliografía

1. Moratalla R. Neurobiología de las metilxantinas. Trastornos Adictivos. 2008;10(3):201-7

2. 2021 Bertasi et al. Cureus 13(4): e14313. DOI 10.7759/cureus.14313